la sirena y la rata

En medio del océano inmenso y azulado, donde el sol se refleja cada amanecer, y todo `parece anaranjado, en una playa lejana, en un país lejano, siempre salía al amanecer desde el mar, una sirena que se sentaba en la roca mas alta del risco y con su arpa, cantaba canciones de amor, todos se paraban a escucharla, aunque no la veían, y quedaban emocionados sus corazones con tan mágica voz, ella vivía en el fondo del océano, cerca de los corales, allí, donde todo es silencio y paz, en una cueva donde tenia como amigos a arenas, las gaviotas volaban por debajo., y ver las caracolas que le regalaba el mar, luego ella bajaba a la playa y se iba nadando mar adentro hasta su  hogar. Ya don Arnaldo un viejo pez del océano, le había dicho que era peligroso, pero ella era tan feliz…..la sirenita tenia largos cabellos rojizos como el sol, ojos color mar, una carita pequeña y bonita, era encantadora. Un día como todos los días, salía a cantar, pero por allí pasaba un Rey  lejano con toda su comitiva, cuando oyó esa dulce voz, se enamoro de ella, desde su esbelto caballo blanco, ordeno a los caballeros de la corte, que le trajeran aquella dama con voz de ángel, claro el no sabia que era una sirenita, -la llevare al castillo-,-quiero que solo cante para mi- dijo con voz de trueno, y así salieron sus caballeros hacia la playa a buscar a la dama, llegaron sin hacer ruido, lentamente, se asomaron al risco y allí distinguieron una cabellera hermosa y el arpa, dorada….enseguida se acercaron más y sin ser vistos taparon con una capa a la sirenita y la raptaron, envuelta en la capa la sirenita lloraba y pedía por favor! Necesitaba volver al agua, ….cuando llegaron al castillo y se presentaron ante el rey. Extendieron la capa yn allí desenvolvieron a la sirenita,

Grande fue la sorpresa de todos al verla!-¿Qué eres?, que extraña criatura eres? Le preguntó el rey enfadadísimo, -

-soy una sirena del mar-

-¡una sirena, mitad mujer-mitad pez?!-

-si, rey , por favor necesito agua del océano para vivir-

El rey se acaricio la barbilla, pensando, un rato, luego mano a llenar la fuente de agua que se hallaba en el patio y puso allí a sirenita.

Allí te quedaras, cantaras para mi, ahora eres mía.-dijo con voz fuerte, y terminante-

-por favor, o rey, déjeme ir a mi hogar!-lloraba la sirenita,

Pero fue en vano, allí la dejo……sirenita cantaba al amanecer todos los días, pero ya no veía el mar,

Las altas murallas, encerraban al castillo, cada gota de sus lagrimas eran perlas que rodaban por el patio del castillo,

Cada una de ellas iba a para directamente e ala cueva de una ratita que vivía allí hacia muchos años con su familia, ella recogía esas perlas y las guardaba cuidadosamente, como especial tesoro….claro no era una rata común, en realidad era la princesa que a causa de un hechizo termino convertida en rata, el rey ,su hermano, mando a la bruja a que se la sacara de encima, ¡claro nunca pensó que ella estaba aun en el castillo, aunque fuera una simple ratita…..cada anochecer, la princesita visitaba a la sirena, así le contó todo lo sucedido, y se hicieron grandes amigas…..reían a veces, otras solo suspiraban mirando el titilar tibio de las estrellas…..y así pasaron los años, y mas años, claro  princesita no envejecía, y sirenita tampoco, eran seres mágicos, en cambio el rey ya muy viejo, murió, y le siguió su hijo que era aun mas malo, tanto que le prohibió a sirenita cantar, dijo que estaba cansado de su canto, que la escuchaba desde niño, sirenita lloro aun mas…..solo l a consolaba la princesita que venia siempre……cierta mañana, apareció por el castillo un honorable caballero

Vestido de plata y oro, en su corcel negro, con lanza y armadura, sus ojos le recordaron  el azul de mar, a sirenita, el curioso, se le acercó, la miro, y miro, y le pregunto que era, y que hacia allí en el patio del castillo.

-es una larga historia, mi señor- le dijo sirenita-

-tengo tiempo de escucharte- dijo caballero y se sentó al borde de la fuente, enseguida vino ratita, digo princesita y también le conto su historia, enmudecido y aturdido, el caballero no podía creer tanta maldad en el corazón de un rey, o de varios en este caso, y juro liberarlas a las dos!-es muy peligroso- susurro princesita-., muy arriesgado-dijo sirenita, pero el se levanto y salió a galope, las dos se miraron y una luz de esperanza brillo en sus ojitos tiernos, pasaron varias noches, cuando la luna llena iluminaba el patio y todo era color plata, apareció una sombra, sirenita se despertó y se asusto, pero era caballero, le hizo seña que guardara silencio….-mira puedo ayudarlas- pero necesito un ejercito bien equipado para atacar el castillo y derrocar al rey tirano, y lamentablemente no tengo dinero-.así que me llevara tiempo….pero cumpliré mi promesa-

Ratita que había escuchado todo, dijo-tengo la solución-, -ven, sígueme- y se dirigió a su cueva. Comenzó a sacar perlas bellísimas, blancas de nácar puro, valiosísimas,-con esto podrás comprar todo un ejercito- asombrado caballero junto las perlas en una bolsa y marcho enseguida, no sin antes pro meterles que volvería y cumpliría su juramento, a pocas lunas, una tarde en que el sol daba de lleno y todos en el palacio dormían la siesta, se escucho un barrullo de trompetas, y gritos, y el castillo fue invadido por cientos de caballeros que sin herir a nadie se hicieron cargo del castillo, el rey fue condenado por la justicia a vivir en el destierro, hubo una gran fiesta y coronaron como rey a caballero, el mando a buscar a la bruja, hija de la bruja que había echo el hechizo a princesita y esta ayudo a que se cortara tal hechizo, y así princesita se convirtió en una muchacha bellísima, de cabellos dorados, y cuerpo esbelto, claro se caso con el rey, en cuanto a sirenita, que canto en las bodas de los reyes, se le concedió la libertad, fue llevada de nuevo a la playa, y allí canto de nuevo al amanecer, después se perdió en el océano, donde aun , a pesar de los años, todos la esperaban……y así entre perlas, hechizos, cantos y reyes, todo fue felicidad y buena vida en el castillo y en el océano……